El kirchnerista Martín Pérez, intendente de Río Grande, cuestionó las políticas del presidente y advirtió que no permitirán la instalación de una base militar de Estados Unidos en Ushuaia. Pérez reafirmó su compromiso con la soberanía y la defensa de los intereses de Tierra del Fuego, destacando la necesidad de proteger el territorio fueguino frente a medidas que podrían poner en riesgo la autonomía y seguridad de la provincia.

El intendente de Río Grande, Martín Pérez, expresó su rechazo a la posibilidad de que el gobierno nacional permita la instalación de una base militar de Estados Unidos en Ushuaia. El dirigente kirchnerista sostuvo que una decisión de ese tipo implicaría una amenaza directa a la soberanía argentina y al control nacional sobre el territorio fueguino, por lo que afirmó que no lo permitirán bajo ninguna circunstancia.

Pérez advirtió que Tierra del Fuego tiene un valor estratégico por su ubicación geográfica y por su cercanía con la Antártida, lo que hace necesario mantener una postura firme en defensa de los intereses nacionales. En ese sentido, remarcó que cualquier avance de una potencia extranjera en la zona representaría un retroceso en materia de independencia política y militar.

El jefe comunal reafirmó además su compromiso con la defensa de la soberanía y la autonomía provincial. Subrayó que el rol de los fueguinos es cuidar los recursos y el territorio, garantizando que las decisiones que se tomen respondan siempre a los intereses de la comunidad local y no a presiones externas o acuerdos internacionales que puedan vulnerar esos principios.

Por último, Pérez insistió en la importancia de que el gobierno nacional priorice el diálogo y la transparencia sobre cualquier iniciativa relacionada con la defensa o la presencia extranjera en el sur del país. “Defender Tierra del Fuego es defender la Patria”, señaló, reafirmando su postura frente a una medida que considera inaceptable para el futuro y la seguridad de la provincia.